sonrisas de silencios

Las cosas cambian, las personas se van, solas, por decisión de ellas mismas, sea por el tiempo, las distancias, los actos de cada uno o los defectos pero todos se acaban yendo en algún momento del camino. Llega un punto que por mucho que quieras o sientas, enfrentarse a decepciones y fallos, errores y no saber dar a cada cosa la importancia que se merece, revientas. Revientas de tal forma que solo piensas en el que lo mejor es dejar ir a esa persona para que realmente haga lo que quiera y sobretodo disfrute con, como, donde y cuando quiera porque porque la vida se basa en eso, en  dejar marchar pero siempre dejando la puerta abierta con el fin de que llegue alguien que te demuestre que está, con quien puedas disfrutar tanto que no te quede ni tiempo para preguntarte si se quedará para siempre o algún día se irá también.

desgraciadamente pertenecemos a donde sentimos y somos no donde nos dan.

aquí lo que manda es lo que late aunque nos mate

hay días en los que no apetece nada, pero cuando está cerca esa persona que nosotros consideramos especial, la que siempre consigue sacarnos una sonrisa, alegrarnos e incluso cambiar la opinión sobre lo que nos preocupa, esa persona que con solo estar cerca va a hacer que nuestros minutos cambien, mejoren, tengan sentido cambia todo... esa es la persona. quered, quered con amor y sin miedo, de verdad, porque no hay algo más bonito que estar con una persona que a la vez sea tu amigo/a, tu compañero/a y saber escuchar y que te escuche, que te ayude y sobre todo que te apoye, porque si compartes tu tiempo con una persona que está todo el día discutiendo y enfadándose no es bueno, no es lo que uno se merece, esa, es la típica persona tóxica.

hay veces que conviene alejarte de lo que te haga daño por mucho que te duela o por mucho que te importe por el simple hecho de que no te conviene, que estás más mal que bien y que no vives, que lo único que haces es pensar en eso, en esa situación y en esa persona.

ahora ya no me arrepiento de nada, ya te dije que estar contigo nunca fue perder el tiempo, aunque ahora sabemos que ya no hay solución, no había nada que me hiciera más feliz que cuando estaba contigo, pero ahora el que se arrepiente no soy yo, y por ello, me he dado cuenta que fuimos tontos y no nos cuidamos, creí ser fuerte y luché pero no sirvió de nada. fundamental, indispensable para mi, eso es lo que eras, pero pasaste, decidiste recordar aquella vez que te fallé y no luchar más que lo bien que estábamos. y que tonta soy todavía pensando que vas a volver para no marcharte. pero al final se resume en eso, en palabras que se irán borrando con el tiempo porque no supiste darte cuenta de que te necesitaba conmigo, que necesitaba que lucharas como yo aún sabiendo que era un desastre.